La Cámara de Diputados comienza a publicar la nómina de personal

El Director General de CADAL expresó que «es un gran mérito del oficialismo que se haya aprobado la ley de Acceso a la Información Pública y ahora los datos permiten generar un debate sobre cómo modernizar y jerarquizar la función pública. Esta es la cuestión de fondo y el PLN tiene que ser el ejemplo para el resto de la administración pública nacional en terminar con el amiguismo y clientelismo político».

Luego de la difusión del Documento CADAL N° 149 "El Congreso a contramano de la austeridad que reclama Macri", publicado el 31 de octubre del corriente año, en el sitio web de la Cámara de Diputados de la Nación Argentina comenzó a publicarse parcialmente la nómina de su personal.

Asimismo, trascendió que a raíz de la reglamentación de la Ley de Acceso a la Información Pública, la oficina de Información Pública está pidiéndole la información a todas las áreas del Poder Legislativo Nacional.

La publicación de CADAL señalaba que “luego de la esperada sanción de la Ley de Acceso a la Información Pública, la Cámara de Diputados de la Nación  sigue sin publicar la nómina de empleados y la respectiva dependencia donde cada uno de ellos cumple funciones. Esto último es lo que desde hace años hace el Senado de la Nación, lo cual permite conocer donde está asignado cada empleado”. Y agregaba: “Por ejemplo, la información que brinda la cámara alta posibilita acceder al número de empleados que tiene cada senador/a nacional”.

El autor de la publicación de CADAL recibió el martes 7 de noviembre pasado un llamado de una Diputada Nacional de Cambiemos quien le afirmó que los empleados no se habían incrementado en la cámara baja desde la llegada del nuevo gobierno y que debería haber consultado antes de publicar.

Al respecto, Gabriel Salvia, Director General de CADAL y redactor de la publicación, le respondió que los datos surgen de las planillas del Poder Legislativo que se publican en el presupuesto nacional. Salvia actualiza estos datos del presupuesto desde que comenzó a implementarse el presupuesto por programa en los noventa y junto a Adrián Lucardi, consejero académico de CADAL, vienen documentando la cantidad de empleados y los debates del presupuesto del Poder Legislativo Nacional desde el año 1900. Ambos integrantes de CADAL han publicado varios trabajos sobre el tema, incluyendo unas recomendaciones de reforma político-administrativa en el Poder Legislativo Nacional.

Para acceder a las planillas del presupuesto y recursos humanos del Poder Legislativo Nacional de los años 2016 y 2017, y del proyecto de ley de presupuesto 2018 que Salvia envió a la diputada nacional de Cambiemos, haga click aquí

Vale la pena recordar que el 27 de enero de 2016, Salvia y Lucardi publicaron en el diario La Nación el artículo "El Congreso se debe una reforma administrativa a fondo". Anteriormente, el día 5 de ese mismo mes, Salvia había publicado también en La Nación, el artículo "El Congreso necesita algo más que una auditoría". Posteriormente, el 1 de febrero de 2016 CADAL publicó su Documento 147, en el cual Adrián Lucardi analiza "Los debates legislativos sobre el presupuesto del Congreso Nacional a principios del siglo XX". Y previo a las primarias del 2015, Salvia había publicado un Documento CADAL sobre "El Vicepresidente y la austeridad en el Senado de la Nación", sobre el cual entonces no se pronunció ningún precandidato a Vicepresidente. En la sección de publicaciones, Documentos CADAL, podrán encontrarse estas y otras publicaciones sobre el tema.

El Director General de CADAL expresó que “es un gran mérito del oficialismo que se haya aprobado la ley de Acceso a la Información Pública y ahora los datos permiten generar un debate sobre cómo modernizar y jerarquizar la función pública. Esta es la cuestión de fondo y el PLN tiene que ser el ejemplo para el resto de la administración pública nacional en terminar con el amiguismo y clientelismo político”. Salvia agregó que “a la reticencia del sindicato legislativo, que seguramente querrá mantener sus privilegios, hay que confrontarla con información comparada para dejar en evidencia lo desproporcionado y clientelar que es el empleo público en el Congreso argentino”.